Autor: Hugo César Delgado Ayala
Docente de la UAN y Escritor
Varios relatos se han escrito sobre este lugar, dicen que se apareció el diablo hace años, cuando se llamaba el barba roja, después leí que la santa muerte se le apareció a una chica que ahí trabajaba, y además, un taxista relató lo que él describe como el regreso del mismísimo satanás al mismo bar años después.
Cuenta un amigo que ahí trabaja que una ocasión estando limpiando la barra, entró una pareja y se sentaron casi frente al baño de mujeres, los meseros no llegaban aún y a él le tocó atenderlos. A los minutos vio que entró una chica, él la saludó pero ella ni siquiera volteó a mirarlo, sólo caminó hacia adentro, como por inercia.
Mi amigo fue a preguntarle qué le servía para tomar, pero al buscarla no la encontró; sólo había dos opciones, el baño de mujeres o la bodega, quizás confundiéndola con el WC. Entró al cuarto de víveres pero no había nadie, entonces no había duda, aquella chica había entrado al baño.
Esperó pacientemente unos minutos, pero la joven no salía. Fue a donde estaba la pareja y les preguntó a dónde se había metido la joven, pero sus caras de asombro lo desconcertaron más de lo que ya estaba, ni siquiera habían visto entrar a nadie, él les dijo que sí, que había una chica seguramente en el baño, y que quizás estaría en problemas, porque no lucía nada bien al entrar.
La chica se ofreció a entrar para ver si la encontraba, pero fue en vano, no había nadie en el baño, el barman sintió que su cuerpo se erizaba al escuchar aquello, entonces comprendió que se trataba de un espíritu errante, aunque no sabía qué necesitaba aquella joven, o porqué había decidido entrar ahí; era pues, un alma en pena más de las miles que recorren sus pasos, incluso no descarta que sea el alma de aquella chica raptada por el mismo satanás, que según testigos, su cuerpo quedó inerte y calcinado en el baño de aquel bar.
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