Autor: PROFR. EDUARDO GÓMEZ ENCARNACIÓN.
DATOS OFICIALES.
Catálogo Nacional de Monumentos Históricos Inmuebles.
Instituto Nacional de Antropología e Historia.
Consejo Nacional para la Cultura y las Artes.
INAH Centro Nayarit.
Inmuebles con valor patrimonial (histórico) y su ubicación.
Año: 1994.
Estado: Nayarit.
Municipio: Bahía de Banderas.
Localidad: Valle de Banderas.
Colonia: Centro.
Calle y número: Hidalgo s/n
Otra localización: Esquina México.
Casa habitación-comercio.
Época de construcción: Siglos XIX/XX
N° de Clave: 180200010002.
Algunos datos históricos.
La traza urbana actual de Valle de Banderas fue obra del “porfiriato”. Es probable que la alineación se haya hecho entre 1885 y 1897, durante el mandato del General Leopoldo Romano, primer Jefe Político del Territorio de Tepic. El General Romano, considerado uno de los forjadores del Nayarit moderno, se distinguió por haber emprendido una serie de obras en Tepic y algunos otros lugares del Territorio. Las calles céntricas, que rodeaban el espacio dispuesto para la plaza, recibieron los nombres más socorridos de esta época: Juárez, hoy Hidalgo, Reforma, hoy Veracruz, e Independencia, hoy Morelos; el frente de la iglesia quedaría para atrio de la misma.
Casa construida de adobe con terminado de enjarres de cal de concha y arena cernida. Dos plantas con tapanco o entrepiso de tablones de madera de parota o amapa; pisos de ladrillo quemado. En su interior tuvo habitaciones confortables y fue una de las casa mejor habilitada de su época. Por tradición oral se reconoce como antiguo dueño a don Marciano Hurtado, comerciante exitoso desde el principios de Siglo XX, dueño de más de media cuadra donde se asienta la casa en cuestión. La casa, construida especialmente para comercio, contó con panadería, venta de abarrotes que incluían enlatados, telas finas, aperos de labranza y talabartería, almacenes para granos, etc. En las primeras décadas del siglo pasado fue la tienda más surtida de este rincón del Territorio de Tepic después Estado de Nayarit.
Casado en segundas nupcias, a la muerte de don Marciano quedó como dueña su joven esposa Marina Valera, quien heredó a sus hijos.
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